Tehuelches. De Carlos Scherpa. Dibujo Mario Carper



Tons (la oscuridad) engendró a tres espíritus que eran muy temidos por los tehuelches. Se dice que cuando la luna y el sol se fundían tras el horizonte, la oscuridad invadía la tierra hasta el regreso de los amantes.
Pero sólo aparecía el sol. Entonces Tons se alejaba de la tierra para encontrarse con el Tiempo que era su consorte y con él engendró a los tres malos espíritus llamados Axshem, Kélenken y Maip. Estos dos últimos eran mellizos.
Axshem era el que vivía en el fondo de un manantial sulfuroso. Kélenken en cambio, deambulaba por la Patagonia derramando sus males por doquier mientras que Maip, espíritu dañino que representaba el viento helado, acompañaba a su hermano mellizo, apagando los fogones, entumeciendo los miembros de los seres, matando a los inocentes pajaritos sin guarida y helando los tiernos brotes de las plantas.
Este es tons, la oscuridad. Transformado en Guerrero.

*Del libro Joiuen Tsoneka (leyendas tehuelches) de Mario Echeverría Baleta